martes, 9 de junio de 2009

Lucha II

...lanzandole pequeñas estocadas. Fubar apenas se inmutó. Tan solo estaba buscando debilidades en su defensa, y mientras menos le mostrase mejor sería.
Mantenía la calma. Era mejor buscar la debilidad de tu adversario antes de asestar el golpe.
Su poderoso brazo relampagueó, golpeando un costado del joven. Esta vez Grumdril probó el acero, pero la gruesa armadura de cuero que llevaba desvió ligeramente el impacto y lo amortiguó. De no haberla tenido, en aquel instante el joven tendría las costillas aplastadas y ensangrentadas por el corte; el brazo de Fubar podría machacar la cabeza de un carnero.
El duelo se estaba prolongando demasiado, y eso no le gustaba nada a Fubar. Tenía que establecer su superioridad...aunque fuera con alguna treta sucia.
El suelo de la sala estaba lleno de fina tierra; de una patada mandó un puñado a la cara de su contrincante, cegandolo. El joven gritó con frustración, y como se sabía perdido comenzó a lanzar tajos al aire.
Ya no tenía sentido.
La espada de Fubar hendió el craneo de Grumdril como si fuera un melón maduro, y los huesos al romperse crujieron desagradablemente. La sangre manó, salpicandole el rostro de ceño fruncido y las ropas de jefe, pero a Fubar no le importó. Con una patada sacó la espada del amasijo que era ahora la cabeza del joven guerrero y la limpió en sus ropas.
Nadie le volvería a retar...por un tiempo.

2 comentarios:

  1. menos mal, no pegaba un fin feliz para grumdril, ganar con trucos sucios es muy buena idea, uno se cansa de leer combates de esgrima perfecta cuando se pelea a muerte, es tan surrealista...

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  2. hombre, cuanto tiempo! xD que tal los examenes, bien? espero que si!
    si, lo de las peleas super limpias en las que todos tienen honor supremo...bueno, son un poco chorras xD esta claro que lo importante es ganar...no quedar como un angelito jajaja

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